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DANIEL OVIEDO SOTELO*

LILIAN RODRÍGUEZ**

GRISELDA ANDREA

ZARACHO ROMÁN***

ARAMI CÁCERES ROMERO****

DALIA DORALICE DÍAZ DENIS*****

Percepciones y valoraciones de los estudiantes acerca de la carrera de Ciencias de la Educación en el Instituto Nacional de Educación Superior (INAES) de Asunción, Paraguay

Students’ insights and appraisals about the Educational Sciences career at the National Institute of Higher Education (INAES) in Asunción, Paraguay

Recibido: 24 de abril de 2019 | Aprobado: 16 de junio de 2019

Resumen

Este estudio aborda la apreciación de los estudiantes acerca de la edu- cación recibida en el turno noche del Instituto Nacional de Educación Superior (INAES) de Paraguay, en el nivel de grado. El objetivo principal de este artículo es evaluar la percepción de los estudiantes de Ciencias de la Educación sobre su propia licenciatura e institución. La investiga- ción se realizó a través de un enfoque cuantitativo, diseño descriptivo y corte transversal, para la cual han sido encuestados 95,6 % de los estudiantes distribuidos en los tres cursos/grupos de la única carrera del turno de la noche. Los resultados muestran las principales fortalezas y debilidades detectadas o valoradas por los estudiantes en los que pre- dominan las respuestas positivas y de conformidad para las gestiones directivas y administrativas, así como para el plan curricular de la carrera, la infraestructura, el servicio bibliotecario y la predisposición para par- ticipar en actividades de investigación y de extensión. Los estudiantes también desean mejoras en la conectividad a Internet, los servicios de ali- mentación, algunos aspectos del desempeño docente, las orientaciones sobre la práctica profesional y, sobre todo, en el tratamiento de los ejes transversales del currículum de la carrera. Como conclusión se afirma

*Doctor en Filosofía por la UAM Iztapalapa de México, maestro en Estudios para la Paz por la UAEMéx. Es investigador categorizado nivel 1 en el PRONII de Conacyt (Paraguay), y docente del INAES, en la carrera de Ciencias de la Educación y en sus maestrías. Ha realizado inves- tigación posdoctoral en la Universidad de Granada. Para contactar al autor: oviedosotelo@gmail.com

**Magíster en Educación Superior por la Universidad Americana, y Magíster en Investigación Científica por la Universidad Autónoma de Asunción. Es docente investigadora de la carrera de Ciencias de la Educación y técnica del Departamento Técnico de la Dirección Acadé- mica (INAES: Asunción, Paraguay), Para contactar a la autora: silvanarodriguez17@gmail.com

***Licenciada en Nutrición. Estudiante de la Lic. en Ciencias de la Educación del INAES.

****Estudiante de la Lic. en Ciencias de la Educación del INAES.

*****Estudiante de la Lic. en Ciencias de la Educación del INAES.

ISSN (en línea): 1814-4152 / Sitio web: http://cuaderno.pucmm.edu.do

CÓMO CITAR: Oviedo, D., Rodríguez, L., Zaracho, G., Cáceres, A. y Díaz, D. (2019). Percepciones y valoraciones de los estudiantes acerca de la carrera de Ciencias de la Educación en el Instituto Nacional de Educación Superior (INAES) de Asunción, Paraguay. Cuaderno de Pedagogía Universitaria, Vol. 16, n.º 32, julio-diciembre, pp. 82-99

que los estudiantes tienen una alta valoración hacia su carrera y la institución, pero que también se precisan transformaciones en algunos aspectos y áreas que consideran importantes.

Palabras clave: estudiante universitario; percepción; participación estudiantil; ciencias de la educa- ción; eje transversal.

Abstract

This study addresses on the students’ appraisal regarding the education they received at the National Institute of Higher Education (INAES) in Paraguay at the grade level. The main objective of this article is to analyse the students’ perceptions about their degree on Educational Sciences, and about their institution. Using a quan- titative approach, descriptive design and cross-sectional: 95.6% of the students have been surveyed. The respondents are distributed in the three courses/groups of which it is the only career of the night shift. The results show the main strengths and weaknesses detected or valued by the students, in which the positive and compliance ­responses prevailed for the management and administrative areas, as well as for the curricular plan of the career, the infrastructure, the Librarian service and the interest in participating in research and outreach

activities­ . However,­ the students want better internet access, food services, some aspects of teacher perfor- mance, guidance on the teaching internship and, mainly, the treatment of the transversal axes in the career curriculum. In conclusion, it is stated that the students highly value their career and the institution, but they also want the improvement in some aspects and areas that they consider important.

Keywords: undergraduate student; perception; student participation; educational sciences; cross-curricular theme.

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1.Introducción

1.1.Justificación

Que los estudiantes de educación superior expre- sen sus posturas, ideas y hasta propuestas acerca de la educación recibida y de cómo actuar para transformarla y mejorarla, es algo frecuente, sobre todo en Estados democráticos y de derecho. De hecho, conocer la percepción que tienen ellos sobre su realidad, como principales actores de las instituciones (así como los profesores), permite aproximaciones a puntos de vista e ideas impor- tantes, y sumamente útiles.

Lago de Vergara, Gamoba y Montes (2014, p. 4) consideran que “es importante conocer las re- presentaciones que tienen estos actores sobre su modo de ver la educación superior y su visión sobre la calidad de la misma”. Sin embargo, el es- cucharlos o el investigar sobre sus necesidades, opiniones e inquietudes, no siempre son activida- des frecuentes entre los directivos y profesores o en las instituciones.

Estudiar las miradas y perspectivas de los estu- diantes también ayuda a cumplir con los fines de la educación superior, que, en Paraguay, son principal- mente: desarrollo de los valores de la democracia, formación profesional, investigación, extensión y servicio comunitario, y transmisión de la cultura.

En atención a lo expuesto, desarrollamos este estudio relevando datos de la realidad valorada y

sentida en nuestra institución de educación su- perior, en el turno de la noche (por presentar este grupo características distintivas con relación a los otros dos turnos: mañana y tarde), desde la per- cepción de los mismos estudiantes. Ellos están entre los más indicados para determinar, medir o juzgar las fortalezas y debilidades institucionales en sus diversas áreas, aspectos y desarrollos.

Hay tres problemas directamente vinculados a esta investigación, el primero es la falta de información sistematizada y adecuada acerca de la satisfac- ción de los estudiantes con respecto a su carrera y a su institución; el segundo es la necesidad de determinar las áreas o aspectos institucionales que necesitan transformaciones o mejoras, y el último es que se debería promover una cultura de la participación estudiantil dentro del INAES a través de las vías o canales adecuados, con el fin de desarrollar la criticidad e influenciar en la cali- dad de los procesos.

Estudios sobre la satisfacción o las percepciones de los estudiantes respecto a su formación se han realizado en diversas universidades y países, aunque pudieran ser más frecuentes sobre los egresados (ver, por ejemplo: Rodríguez y Pérez, 2018; González, 2014; Demicheli, 2009; o López, Álvarez y Berra, 2017). Al consultar la literatura, se aprecia la existencia de este tipo de investigacio- nes, también acerca de aspectos específicos de la educación superior, como la calidad de la docencia

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universitaria (De-Juanas y Beltrán, 2014), el plan de acción tutorial (Gil-Albarova, Martínez, Tunnicliffe y Moneo, 2013), el servicio de orientación (Gil, 2002 y Sánchez, 1998), los cursos virtuales a distancia (Manrique y Sánchez, 2019), etc.

1.2. Breve marco teórico

La Declaración de Budapest sobre la Ciencia y el uso del Saber Científico, de la Unesco (1999), habla acerca de la “importancia [de] que la enseñanza esté relacionada con la capacidad científica de los individuos, para que puedan participar activamente en la sociedad” (Rodríguez, 2017). El documento, así como otros similares, vincula a la participación con la ciencia y el conocimiento, un vínculo que denota características especiales en cuanto al in- volucramiento de los estudiantes se refiere.

Diversos pedagogos y autores concuerdan en la importancia de la participación de los estudiantes en la educación, a través de sus voces, sus opi- niones, sus decisiones y sus propuestas. Al ser los principales interesados en su formación, suelen tener mucho que decir, sea de manera oficial o no oficial, formal o informal. Al respecto, Sandoval

(2011) afirma:

Escuchar las voces de nuestros alumnos no es simplemente ofrecer la oportunidad para que éstos puedan comunicar sus ideas y opiniones, sino ser conscientes del papel que pueden tener a la hora de contribuir a los cambios educati- vos. En este sentido podríamos añadir que las distintas formas de participación del alumnado dependen en buena medida del protagonismo que concedamos a los alumnos. (p. 116)

Es decir, no basta con permitirles “buscar” la partici- pación, sino que se les debe facilitar, ya que son los principales destinatarios de los procesos educativos, entonces “es importante conocer las representacio- nes que tienen estos actores sobre su modo de ver la educación superior y su visión sobre la calidad de la misma” (Lago de Vergara, Gamoba y Montes, 2014, p. 160). Los mismos autores citados, sostie- nen que sus voces son igual de valiosas que las de los profesores (p. 161), son el principal estamento para el cual se diseñan los servicios universitarios. Las “voces de los estudiantes” son útiles y necesitan ser oídas, sobre todo, si trabajamos o nos relaciona- mos dentro de instituciones democráticas. Además, esta pretendida participación estudiantil puede obte- ner una diversidad de resultados provechosos, pues

“participar en algo y para algo logra en un estudiante identidad, pertenencia, seguridad, aceptación, voz” (Hernández, 2015, pp. 3, 5).

1.2.1. Participación democrática

En muchos países las instituciones de educa- ción superior establecen como uno de sus fines fomentar los valores de la democracia o que deben ayudar a preparar a los ciudadanos para la misma. Por lo tanto, se podría esperar que la “cultura democrática” sea promovida en las aulas, especialmente con el ejemplo. Mal podría una uni- versidad o instituto superior “autónomo” y “libre” desarrollarse en un ambiente de opresión o de im- posiciones de los directivos o docentes, donde el estudiante sea un mero receptor pasivo de reglas o de imposiciones institucionales.

En un artículo del 2012 sobre la participación estu- diantil en las universidades, Soler, Pallisera, Planas, Fullana y Vilà dijeron que:

En los últimos años se han desarrollado varias investigaciones que han puesto de relieve la importancia de la participación, tanto juvenil como ciudadana en general, en el manteni- miento y desarrollo del sistema democrático, [como] una dimensión de la calidad de vida de las personas, ya que está estrechamente rela- cionada con los procesos de inclusión social, integración e identidad. [...] La universidad de- bería ser el reflejo del trabajo realizado en las anteriores etapas educativas y un modelo para el resto de la ciudadanía que mostrará las po- sibilidades y virtudes que la participación lleva implícita. (p. 545)

La participación, justamente, es uno de los prin- cipales principios o valores que logran que las democracias funcionen y se desarrollen. No es casualidad que se hable de “Educación para la democracia”, y no “sobre” o “de”. La democra- cia es una forma de vida o de ser, altamente útil para el desarrollo de la vida académica. González y ­González (2007) habían reflexionado sobre el rol del docente en todo esto, y escribieron que:

El docente transmisor del conocimiento, gestor de información y modelo educativo ha de com- partir con el estudiante los conocimientos, vivencias, experiencias y reflexiones respecto a los contenidos de enseñanza en un ambiente de diálogo, tolerancia, intercambio y respeto

que propicie la participación y el compromiso del estudiante en el proceso de aprendizaje y que se expresa en su condición de tutor. (p. 1)

De hecho, es tal la importancia de la participa- ción estudiantil que algunos la consideran una “estrategia de formación ciudadana” (Martínez, 2016; ­Hernández y López, 2014, p. 43) o un “ele- mento clave para la construcción de ciudadanía” (Hernández,­ 2015, p. 1), siendo también importante “como elemento de formación en las universida- des” (Hernández y López, p. 53). La democracia precisa que se dé voces a todos, más aún desde las instituciones dedicadas a la ciencia, la forma- ción y el conocimiento.

1.2.2. Democracia y conflictos

Aunque no es el objeto principal de este tra- bajo, agregamos que la participación estudiantil usualmente desemboca no sólo en una mayor vivencia democrática en los centros de estudios, sino también en interesantes potencialidades para la transformación positiva de estas instituciones, porque además de las miradas diferentes o nuevas propuestas que pueden aportar los estudiantes, también suele suceder que las instituciones que escuchan y dan “voces” a sus estudiantes se ponen en tránsito hacia la transformación de sus conflictos, y hasta logran evitarlos o gestionarlos pacíficamente y con más éxito.

Llamamos aquí “conflictos” a los “hechos humanos inevitables y constantes a lo largo de la historia, pero que no necesariamente conducen a situaciones negativas, de lucha armada, daño, atentado, dolor, violencia o guerra”, puesto que debemos recono- cer el “carácter conflictivo de la vida y de la historia” (Oviedo, 2013, p. 52); es decir, los conflictos son inevitables, pero pueden actuar de alicientes. En nuestras instituciones educativas de la república, la falta de atención a las inquietudes estudiantiles no pocas veces ha generado conflictos que los estu- diantes canalizaron por vías negativas, en forma de violencias físicas, psicológicas o simbólicas.1

La transformación de conflictos y la participa- ción estudiantil son grandes retos, sobre todo, porque no pueden limitarse a expresarse o aten- derse solamente a través de los más tradicionales mecanismos de las democracias, como el voto y

el asociacionismo (centros estudiantiles), sino que precisan de una diversidad de formas, orientadas desde y hacia la diversidad de actores educati- vos. Una diversidad de opciones institucionales de participación para los distintos estamentos puede constituir un puente entre la educación, la paz y la transformación.

La participación ayuda a reforzar las capacidades institucionales para afrontar los conflictos exitosa- mente, a través de las diversas formas de hacer las paces; de hecho, el trabajo conjunto entre profeso- res y estudiantes sobre las valoraciones de estos últimos es una buena forma de facilitar la libre ex- presión y la participación.

Por último, vale recordar que la transformación de los conflictos precisa de participación, diálogo, creatividad, actitud de escucha, solidaridad y em- patía, entre otros valores, a fin de tener las mejores perspectivas de éxito.

1.3. Presentación de la investigación

Presentamos a continuación el origen y el obje- tivo de la investigación, las preguntas, el equipo de trabajo y los temas que fueron seleccionados y clasificados para ella. Más adelante, exponemos el marco contextual que sitúa el lugar y el universo de participantes, además, se detalla la metodología empleada para investigar la percepción de los es- tudiantes sobre su institución. Posteriormente, en la sección n.° 3 se encuentran los resultados obte- nidos tras la aplicación de los instrumentos, junto con el análisis de los mismos. Por último, se cierra con la discusión final, la cual es una sección que contiene las conclusiones derivadas de los resulta- dos, así como las recomendaciones y unas breves reflexiones finales.

El estudio que sigue, si bien se originó en la necesi- dad de ahondar en cómo los estudiantes perciben y valoran a la licenciatura en Ciencias de la Edu- cación, y en el deseo de darles la oportunidad de expresarse participativamente; también pretendió ayudar a fomentar el pensamiento científico, e in- directamente las relaciones pacíficas a través del diálogo abierto y sincero (como alternativa positiva para la prevención y para la transformación de los conflictos). Además, el trabajo permitió la actuación

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1Violencia cultural o simbólica: hace alusión a todas aquellas conductas (acciones, palabras, silencios y omisiones) que guarden relación con actos que excluyen a otros seres humanos, en especial a personas con cualquier tipo de diferencia física, psíquica, étnica, religiosa, etcétera. También sucede cuando estos comportamientos se justifican haciéndolos parecer correctos, normales o adecuados; y cuando se fomentan o aceptan determinadas violencias hacia grupos, colectivos, etnias o sociedades, sea por discriminación, segregación o prejuicio. (Oviedo, 2013, p. 51)

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de estudiantes de los primeros años en un estudio científico acerca de su realidad, con experiencias prácticas y concretas, lo que contribuyó a la ad- quisición de habilidades investigativas y de análisis, pero también a que se sientan parte en la cons- trucción de su propia formación y en la mejora de la institución.

El objetivo principal de este estudio es evaluar la percepción de los estudiantes de Ciencias de la Educación sobre su propia licenciatura e institución. En esta línea, la pregunta principal de investigación es: ¿Cómo valoran los estudiantes de Ciencias de la Educación del INAES a su carrera y a la insti- tución? Por su parte, los objetivos específicos se refieren a la determinación de las áreas, servicios y aspectos que precisarían mejoras.

El equipo se integró con un técnico de la Dirección de Investigación y una de la Dirección Académica

(quienes son a la vez docentes de la carrera en cuestión) más tres estudiantes seleccionados de la carrera por sus habilidades y niveles de compro- miso con las investigaciones. El grupo optó por cuatro ejes fundamentales, que fueron divididos en ocho ámbitos a evaluar, a saber: condiciones institucionales (infraestructura y servicios), gestión, formación profesional (proyecto curricular, docen- cia y práctica profesional), y fines de la educación superior (investigación y extensión). Los cuatro ejes, con sus ámbitos, corresponden a las fun- ciones de las instituciones de educación superior más las condiciones materiales y administrativas necesarias para el desempeño satisfactorio. Cada ámbito o área, a su vez, se dividió en subáreas o temas más específicos.

Las áreas y subáreas son las diferentes secciones de la encuesta aplicada a los estudiantes cuyos re- sultados más adelante son expuestos y analizados

Tabla 1. Ejes, áreas y subáreas

EJES

ÁMBITOS O ÁREAS

TEMAS O SUBÁREAS

 

 

Aulas

 

 

 

 

1. Infraestructura

Wifi

 

 

 

Sanitarios

 

 

 

 

 

I. CONDICIONES

 

Biblioteca

INSTITUCIONALES

 

Biblioteca

 

 

 

 

2. Servicios

Librería

 

 

 

Cantina y comedor

 

 

 

 

 

 

 

Otros servicios

 

 

Gestión directiva

 

 

 

 

 

Gestión administrativa

II. GESTIÓN

 

 

3. Gestión

Gestión de la carrera

 

 

 

 

 

Comunicación

 

 

 

 

 

Asuntos financieros

 

4. Proyecto curricular

Plan curricular

 

 

 

Competencias transversales

 

 

 

 

 

 

 

Desempeño de los profesores

 

 

 

III. FORMACIÓN

5. Docencia

Evaluaciones de los profesores

 

 

 

Actitudes de los profesores

PROFESIONAL

 

 

 

 

Importancia

 

 

 

 

 

 

6. Práctica profesional

Desarrollo

 

 

 

Instituciones de práctica

 

 

 

 

 

 

 

Documentación

IV. FINES DE LA

7. Investigación

Actividades e interés

EDUC. SUPERIOR

8. Extensión

Actividades e interés

 

 

 

en esta investigación. La experiencia de recolección y análisis de los datos se realizó principalmente a través de la aplicación de cuestionarios online.

Este estudio también incluye una serie de pro- puestas de mejoras o transformaciones, a fin de promover la calidad de la carrera en las diferentes variables de la vida académica, el desarrollo de la educación y los servicios institucionales.

1.4. Marco contextual

El Instituto Nacional de Educación Superior «Dr. Raúl Peña» (INAES), es una institución de edu- cación superior para la formación de profesores, fundada en 1968 como ISE o Instituto Supe- rior de Educación (denominación que llevó hasta 2018). Actualmente el INAES ofrece 12 carreras de licenciatura (Educación Artística, Educación Mate- mática, Trabajo y Tecnología, Educación Escolar Básica y Educación Inicial; así como Educación de la Física - Química, de las Ciencias de la Natura- leza y Salud, de las Ciencias Sociales, de la Lengua Inglesa, de la Lengua Coreana, de la Lengua y Li- teratura Castellana), dos maestrías en educación (Gestión Educacional e Investigación Educativa), y especializaciones en didáctica. La carrera que nos atañe funciona exclusivamente en el turno de la noche y sus aulas están ubicadas en el pabellón n.° 4; durante el 2018 no había alumnos en el 4.° año (último de la carrera, pues dura 8 semestres), situación que no se ha repetido en el 2019, ya que todos los cursos están funcionando. Para ingresar a la misma es necesario aprobar el primer semestre (curso probatorio) que va de marzo a julio de cada año y se desarrolla de lunes a viernes, de igual forma a los demás semestres de todas las carreras de grado del INAES.

2. Metodología

Este estudio utiliza un enfoque cuantitativo, ya que cuenta con la recolección de una multiplicidad de datos variados, en su mayoría cuantificables. El al- cance es descriptivo.

La población en este estudio está conformada por casi todos los estudiantes de la licenciatura en Ciencias de la Educación (de los tres cursos: pri- mero al tercero), la muestra es total, es decir, toda la población (45 estudiantes).

Para responder a las preguntas de la investigación, con un corte transversal, se aplicó la técnica de la

encuesta a todos los estudiantes. El instrumento que se utilizó fue el cuestionario con opciones múltiples, el cual fue contestado entre el 21 de no- viembre y el 6 de diciembre de 2018.

El cuestionario es un instrumento cuya elaboración se validó por medio de grupos focales con estu- diantes (en octubre de 2018) y a través de una prueba piloto, para que pudiera servir como base a otras carreras o a futuras investigaciones acerca de la apreciación estudiantil con respecto a la for- mación en las instituciones de educación superior.

El cuestionario está disponible en formato PDF (bit. ly/ISEencuesta2018edu) y consta de 7 secciones divididas en 19 subáreas o apartados, compues- tos en total por 87 ítems con respuestas cerradas; además, de forma complementaria se incluyeron cuatro espacios para respuestas abiertas, tres de “sugerencias” (sobre los temas “servicios”, “pro- fesores” y “gestiones”) y uno de “comentarios generales”. Estos espacios fueron completados por la mayoría de los estudiantes, en algunos casos con más o menos extensos escritos conte- niendo recomendaciones, felicitaciones, solicitudes de mejoras, propuestas e ideas.

En todos los casos las encuestas se aplicaron por vía electrónica, a través de Google Forms, concurriendo los estudiantes a las oficinas de la Dirección de Investigación o a la sala de Unidad de Tecnología Educativa (UTE) del INAES (la ma- yoría) a usar las computadoras, en otros pocos casos desde sus propias computadoras o celula- res. Los investigadores juniors (tres estudiantes de la misma carrera: dos del segundo semestre y una del cuarto) dieron instrucciones previas en las aulas a sus compañeros de carrera, y los acompañaron luego al completar las encuestas.

En general, a cada estudiante le tomó entre 10 a 20 minutos aproximadamente completar toda la encuesta. Es notorio el hecho de que, gracias a la observación de los momentos, así como del regis- tro fotográfico, se percibió que existió un interés elevado en participar por parte de la mayoría de los consultados.

Los resultados son presentados a continuación de una manera sencilla y gráfica, de tal manera que se facilite su lectura y se promuevan las reflexiones que busca este estudio, con el fin de orientarnos hacia mejoras. Por lo expuesto, se decidió recurrir a figuras que permitan ver claramente los números

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de respuestas y sus porcentajes; en un solo caso se presenta la media de puntajes, debido a las ca- racterísticas propias del tema.

Al respecto de las cuestiones éticas, en todo el tra- bajo se han seguido de la forma más rigurosamente posible las Normas Éticas del ISE para trabajos científicos, investigaciones y publicaciones, sobre todo en cuanto a los principios de “consentimiento informado”, “confidencialidad”, “evitar conflictos de intereses”, “veracidad y honradez”, “trato adecuado a las personas y cortesía”, “honestidad intelectual” y “valor social o comunitario” (ISE, 2018, pp. 13- 23). Las normas fueron aprobadas y están vigentes desde el 2017; disponibles en la página web de la institución (bit.ly/eticaISE).

2.1. Antecedentes y formato base

Se optó por trabajar a partir de una base o fuente primitiva, un cuestionario elaborado por profesio- nales de la carrera y utilizado en la investigación “Evaluación de las Licenciaturas en Educación de áreas específicas, cohorte 2012 – 2015”; sin embargo, ese instrumento ha pasado por un pro- ceso de actualización, ajuste y validación con los mismos estudiantes de la licenciatura en Ciencias de la Educación y con sus pares de Educación de las Ciencias Sociales. El instrumento base sufrió numerosas adecuaciones, cambios y agregados con respecto a sus contenidos, secciones y orien- tación; todo esto en función a los tiempos actuales, a las voces de los actores y a las necesidades per- cibidas por los investigadores docentes, por los investigadores juniors y por otros estudiantes (que actuaron como colaboradores indirectos).

El proceso de corrección y validación del cuestionario se inició mediante un grupo focal con 6 estudiantes de la carrera de Ciencias de la Educación (represen- tando a los tres cursos) y continuó con la aplicación de 18 encuestas piloto a estudiantes (escogidos al azar) de los cuatro años de la carrera de Educación de las Ciencias Sociales, la cual presenta caracterís- ticas análogas a la investigada.

3. Análisis de resultados

3.1. Perfil sociodemográfico

La encuesta se aplicó a 43 de 45 estudiantes (cifra que correspondía a la población total de la carrera del turno de la noche del INAES en el segundo se- mestre del período académico 2018), es decir la tasa de respuesta alcanzó a un 95,6 %. De los mismos, 22 estudiantes cursaban el 2.° semestre (51,2 %), 9 estaban en el 4.° semestre (20,9 %) y 12, en el 6.° semestre (27,9 %). Eran mujeres la mayoría, 27 estudiantes (62,8 %) frente a 16 hom- bres (37,2 %).

En cuanto a la edad, la que representa la mayor cantidad de estudiantes fue la de 23 años, con 7 personas; la edad mediana fue de 28 años y el pro- medio o media aritmética fue de 28,1 años. Hubo un mayor porcentaje de estudiantes en el rango de 23 a 35 años (28 personas); del resto, 9 tenían entre 18 y 22 años (las cuales tienden a ser las edades prevalentes entre los universitarios del país), y unos 6 poseían de 37 a 54 (de estos últimos, 4 eran ma- yores de 40). Se puede notar que se trata de una población en promedio mayor a la de otras carreras de la institución y que luego de acabar el bachille- rato ha estudiado otra carrera, trabajó o se dedicó unos años a otras actividades.

Sobre la ciudad de residencia, una minoría de 13 estudiantes (30,2 %) era de Asunción, el distrito del INAES.2 Existe una predominancia de procedencia del interior del país, en particular del Departamento Central (el cual bordea la capital del país), con 29 casos (67,4 %), de los que 12 provenían de ciu- dades vecinas a Asunción (6 de Villa Elisa, 3 de Fernando de la Mora, 2 de Luque, 1 de Lambaré) y 17 de distritos más alejados (7 de San Lorenzo, 4 de San Antonio, 2 de J. A. Saldívar, 2 de Ñemby, 1 de Areguá y 1 de Itauguá). Un solo estudiante venía de un Departamento no colindante, La Cordillera, del distrito de Nueva Colombia distante a 40 km del INAES. En total, cada noche asisten desde 12 ciu- dades diferentes. Esta otra característica muestra una mayoría de población urbana, pero no capita- lina, que debe viajar largas distancias para estudiar en horario nocturno.

2Paraguay está dividido en 17 Departamentos, cada uno de los cuales se compone de distritos. Los distritos, son ciudades mayorita- riamente urbanas o zonas urbanas con sus “compañías” rurales aledañas. En total existen más de 200 distritos en una superficie país de 406.752 km2. El distrito de Asunción, capital de la república, es el más poblado y el único que no se halla dentro de ningún Departamento, limitando al sur y al este con el Departamento Central, al norte con el Departamento de Pdte. Hayes y al oeste con el río Paraguay (el cual es, a su vez, límite con la República Argentina).

3.2. Infraestructura

Para medir las opiniones sobre la infraestructura del plantel se utilizó una escala de opciones, a saber: muy bueno, bueno, regular, malo y muy malo. Se pidió a los encuestados que calificaran a siete ítems, incluyendo entre ellos lo referente a las aulas, el Internet, los baños y la biblioteca.

3.2.1.Salas de clase, wifi, sanitarios

En los tres primeros ítems de la encuesta predo- minaron los valores positivos (entendemos como positivos a las opciones de muy bueno y bueno, sumadas entre sí), en: iluminación (77 %), clima- tización (72 %) y limpieza e higiene de las aulas (70 %). Con respecto a la iluminación del bloque de la carrera (pabellón 4), las respuestas dieron una estructura piramidal con el vértice en regular (32,5 % de las respuestas), o sea, es una cuestión que debería atenderse porque, aunque hay confor- midad, no es suficiente.

Al contrario de los anteriores: hallamos predomi- nancia de negativos (sumatoria de respuestas malo y muy malo) en relación a la «disponibilidad de In- ternet en las aulas», con un 89,5 % (32,5 % más 57 %); siendo uno de los ítems con más «rojos» en toda la investigación.

A pedido de los estudiantes del grupo focal, también se investigó la opinión acerca de las instalaciones sanitarias, mediante dos ítems: «limpieza e higiene» de los mismos, y la «disponibilidad de jabón y papel higiénico». Los resultados de estos aspectos, así como los referidos al área “cantina y comedor” se entregaron a los responsables institucionales.

3.2.2.Biblioteca

Los tres aspectos referidos a la infraestructura de la biblioteca (denominada oficialmente DRAI: Departa- mento de Recursos de Aprendizaje e Investigación) han obtenido calificaciones predominantemente positivas (respuestas: muy buena y buena). Desde 79 % para climatización, hasta 88 % para ilumina- ción y 93 % para limpieza e higiene; incluso llegando a calificaciones de muy bueno que van de 37,2 a 48,8 %. Casi no se registraron respuestas negati- vas (variaron solo entre 2,3 y 4,6 %), por lo que se deduce una alta conformidad con las condiciones del centro para el trabajo en dicha dependencia. Esta alta satisfacción hay que mantenerla.

3.3. Servicios

Para esta sección se usaron las mismas cinco op- ciones de la anterior: dos positivas (muy bueno y bueno), regular y dos negativas (malo y muy malo). Se midieron los distintos servicios recibidos en la institución por los estudiantes.

3.3.1.Servicios de la biblioteca

Se encontró una alta conformidad en 3 aspectos: el «trato recibido por parte del personal» (95,3 % de respuestas positivas), el «horario de atención» y la «utilidad de la bibliografía disponible» (81,3 % en los dos últimos). También hubo tendencia positiva en los otros dos temas, pero ya menor, pues la «actua- lización» fue calificada por un 32,5 % como regular.

Al respecto del «mecanismo de acceso a los mate- riales de la biblioteca», se aclara que es el siguiente: los estudiantes consultan el fichero físico o digital

Figura 1. Aulas, bloque y wifi

Figura 2. Espacio de la biblioteca

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Figura 3. Servicios de la biblioteca

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(vía Internet) y luego solicitan los materiales a los bi- bliotecarios, quienes los buscan y se los entregan. Si bien, en este punto la tendencia de la encuesta sigue siendo positiva, es notorio que los valores bajan en relación a los otros ítems; de hecho, du- rante el grupo focal ningún estudiante se mostró partidario o conforme con el sistema actual que no les permite revisar, buscar físicamente o escoger los libros por sí mismos en los estantes.

3.3.2.Librería

En esta subárea, sobre un servicio tercerizado a una empresa privada, las respuestas fueron posi- tivas en su mayoría, en especial en relación al trato recibido. Podría mejorar en cuanto a la variedad y precios de los productos y servicios.

3.3.3.Otros servicios (salud y TIC)

Al respecto de los demás servicios, se encontraron más de 50 % de respuestas muy bueno o bueno al

evaluar a la enfermería, a la atención médica y a la odontología. El último –incluso– no obtuvo ningún negativo, pero sí un 16,2 % de no sabe/no responde. Para los tres tal vez sea necesaria más difusión sobre los horarios de atención y sobre los servicios que brindan. La cantidad elevada de «no sé» puede deberse a estudiantes que no han recurrido a los servicios o a que desconocen cómo acceder a ellos.

Sobre el servicio de UTE (Unidad de Tecnología Educativa), 76,7 % responde que es muy bueno o bueno, mientras que, sobre su accesibilidad y ubi- cación, lo mismo dicen casi 70 %.

3.4. Gestión

3.4.1.Gestiones directivas, de carrera y administrativas

El tema gestión estuvo compuesto por cinco subáreas, las tres primeras son referidas a las ges- tiones administrativas (ítems 1 al 3), de la jefatura

Figura 4. Otros servicios

Figura 5. Gestiones directivas, de carrera y administrativas

de carrera (ítems 4 al 7), y administrativas (ítems 8 y 9). Las opciones de respuestas, entre las ya citadas, fueron cinco; aunque, como se referían a la actuación cotidiana de los funcionarios y directi- vos, variaron entre: nunca, raras veces, a menudo, casi siempre y siempre. Las otras dos subáreas in- vestigadas fueron comunicación y financieros, para los cuales se usaron otras escalas, debido a sus características intrínsecas; en el caso de “aspectos financieros” los resultados irán directamente a las autoridades y no se especificarán aquí.

La figura n.° 5 nos muestra una alta valoración por parte de los estudiantes a tres tipos de gestiones de la institución, pues en todos los casos la suma de las opciones siempre y casi siempre arroja valo- res cercanos o superiores al 60 %. Es de destacar también que tres ítems no obtuvieron ninguna respuesta de nunca (o de no cumplimiento), uno referido al trabajo del equipo directivo (ítem 2), uno referido a la agilidad y oportunidad de las respues- tas de la dirección académica (ítem 3), y el último sobre la jefatura de la carrera (ítem 4), en cuanto a la provisión de las informaciones necesarias para los estudiantes en diversos temas de la vida insti- tucional; este último es el ítem con mayor cantidad de respuestas «siempre» (49 %), lo que constituye un importante aliciente para seguir trabajando.

Un ítem especialmente importante para el logro de un buen clima institucional es «el equipo directivo promueve la participación de la comunidad edu- cativa para la toma de decisiones» (ítem 1) obtuvo también buenas opiniones, con 15 % de siempre y

44% de casi siempre.

3.4.2.Comunicación

Todas las cuestiones de este apartado presentaron tendencias positivas, ubicándose los picos entre el regular y el bueno. El único ítem en el cual las op- ciones positivas rebasan solo por poco el 50 % es el de «actualización de la página institucional».

No obstante, se hicieron cuestionamientos hacia los procesos de comunicación. Los encuestados de- jaron sugerencias en el espacio para comentarios, apuntando a un mejor desempeño: «actualización» y «sistema virtual de acceso a calificaciones, progra- mas de estudio e informaciones de los estudiantes” (dos encuestados); «medio de comunicación más directo y rápido», «la comunicación entre los es- tudiantes y direcciones deben ser más fluidas y también de acceso libre», «mayor comunicación entre direcciones, unidades y departamentos» y «que las informaciones se nos den a tiempo».

Aparte de los citados, algunos puntos a considerar especialmente son el 14 % de respuestas negativas para dos cuestiones: la «actualización de la web», y para «disponibilidad de información» sobre temas de interés general y comunitario. De hecho, a pesar de los esfuerzos del INAES (luego de la autarquía conseguida en 2018), todavía hay aspectos a me- jorar en la página web y en cuanto a los procesos de comunicación, algo que se puede comprobar mediante observación o seguimiento virtual.

3.5. Proyecto curricular

El primer subtema, de los dos de esta área, in- corporó siete afirmaciones, y para medirlas se recurrió a la escala de Likert, con 5 opciones: muy de acuerdo, de acuerdo, ni de acuerdo ni en des- acuerdo, algo en desacuerdo y muy en desacuerdo.

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Figura 6. Comunicación institucional

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Esta subárea obtuvo la mayor percepción positiva entre los temas académicos, pues incluso cinco ítems superaron el 50 % de respuestas muy de acuerdo, a saber: relevancia del plan curricular, pertinencia y utilidad de plan curricular, organiza- ción de las asignaturas, coherencia del perfil de egreso con el plan de estudio, y accesibilidad a los programas de estudio. Además, los desacuerdos en las siete afirmaciones están entre apenas un 2 y un 11,6 %. Estos resultados solo nos permiten postular la necesidad de cambios cuando los com- paramos con los ejes transversales (el subtema siguiente), que serían lo más notoriamente cues- tionado, al respecto de la formación en el INAES.

Siguiendo con lo curricular, para el segundo subtema «ejes transversales», precedido por la pre- gunta: ¿Qué calificación darías a la incorporación y desarrollo de las competencias transversales en tu carrera?, se presentaron siete componentes (7 ejes) y se dieron cinco opciones de respuestas, siendo iguales estos últimos a la escala de calificación aca- démica utilizada en Paraguay; pues, así como en

otros países se califica del 1 al 10, aquí se hace del 1 al 5 (representados también, en orden ascendente, con letras: I por «insuficiente», A por «aceptable», B por «bueno», MB por «muy bueno» y E por «exce- lente»). Es decir, los estudiantes evaluaron a los ejes transversales casi de la misma manera en que ellos son calificados, con la misma escala.

Los ejes transversales medidos son los estableci- dos por el Ministerio de Educación y Ciencias en sus documentos oficiales para docentes y direc- tivos (los números 2 al 5), además a estos cuatro se sumaron Educación para la Seguridad Vial, en atención al Plan Nacional de Seguridad Vial 2013- 2018 (PNSV) que pretende la incorporación del tema desde el nivel parvulario al superior (MEC, 2013, p. 55) y que «busca alcanzar la sensibili- zación y capacitación a directivos y docentes de todos los niveles educativos, dado su rol de mul- tiplicadores a través de sus alumnos» (p. 56). Se incluyó también Educación para la paz debido a las recomendaciones de la Unesco y a que aparece de manera implícita en diferentes planes y programas

Figura 7. Evaluación del plan curricular

Figura 8. Ejes transversales (media)

de estudio del sistema educativo. Educación inclu- siva, por su parte, es quizás la más promovida en los últimos años por el MEC, lo que se puede apre- ciar en las inversiones, los cursos realizados, los congresos, las capacitaciones, los presupuestos, las nuevas exigencias y los documentos oficiales de educación inicial, básica y media.

La tabla de promedios (media), ordenada de mayor a menor, permite notar que tanto Educación In- clusiva como Desarrollo del pensamiento crítico y productivo tuvieron un relativamente buen ren- dimiento, por encima del 3. Aparte, más o menos regulares fueron calificados dos ejes que aún deben mejorar: Educación democrática (tuvo 16 excelente o muy bueno, frente a 17 aceptable o insuficiente), y Educación familiar (obtuvo 16 insuficiente, 4 aceptable, y solo 15 positivos: representados por los excelente o muy bueno); aquí también hay que trabajar más, recordemos que este último eje in- cluye a temas que son el día a día en las aulas de educación básica y media, como proyecto de vida, autonomía y educación sexual. Ligeramente negativo (no llega a 2,5) es el rendimiento de Edu- cación ambiental y desarrollo sostenible con 22 respuestas insuficiente o aceptable; este resultado fue inesperado, debido a ser un tema en boga, de vital importancia y que recibe apoyos y presiones de organismos internacionales para ser atendido,

además de que es impulsado por varias dependen- cias del INAES, como las de gestión de riesgos, la de extensión y la de investigación. Finalmente, los casos con peor rendimiento fueron los de Educa- ción para la paz con 18 insuficiente y 6 aceptable (ya en la introducción abordamos la importancia de las relaciones pacíficas y de la transformación posi- tiva de conflictos); y, Educación para la seguridad vial con 20 insuficiente y 6 aceptable.

3.6. Docencia

En esta sección se prepararon tres subáreas con distintos contenidos, desempeño docente (ítems 1 al 4), las evaluaciones (5 al 8), y actitudes de los docentes (9 al 13); las opciones fueron más cuantita- tivas, cuatro en total (ver figura 9): todos, la mayoría, algunos y ninguno. Además de lo expuesto, se per- mitieron respuestas abiertas, como sugerencias.

Tal como se aprecia, la respuesta más frecuente en todo y cada uno de los ítems es de la mayo- ría; que sumados a la opción todos, dan como resultado una buena o alta satisfacción con los do- centes, que en casi todos los casos es superior al 60 %; salvo en tres ítems, a saber: «realizan cam- bios oportunos con el fin de mejorar a partir de las evaluaciones», «utilizan metodologías innovadoras y variadas acorde a cada asignatura», y «fomentan

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Figura 9. Los profesores

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y posibilitan la participación en actividades de ex- tensión» (este es un pilar de la educación superior). De hecho, en este último ítem, se percibe la mayor cantidad de respuestas ninguno, con 4, único caso que supera la cantidad de 1.

A pesar de todo, no hay que mostrarse tan optimis- tas con estas cifras, pues, aunque haya tendencia a una percepción de cumplimiento mayoritario, se supone que todos los profesores deberían alcan- zarlos, sin embargo, la respuesta de todos fluctúa entre 14 % de utilización de metodologías innova- doras, y 37,2 % por asistencia puntual a clases, mas en ningún otro caso se logró dicha respuesta en más de un tercio de los estudiantes.

3.7. Extensión e Investigación

Esta fue otra de las subáreas del estudio que arrojó resultados muy alentadores, empezando con el elevado «interés en participar en investigaciones científicas» de los estudiantes (37 % de respuestas muy alto y 49 % de alto, o un total de 86 %). También predominaron las respuestas muy alta o alta hacia la «importancia de la Feria de Investigación» (con 81 %), una actividad llevada a cabo anualmente para complementar la formación del futuro licenciado y profesional de la educación. Por último, existió una ponderada relevancia a las investigaciones científi- cas, de 79 % (suma de muy alta más alta).

En cuanto a extensión, los estudiantes demostra- ron mucho interés en participar en los proyectos y también alto reconocimiento a que los mismos son importantes para su formación.

La importancia y el interés hacia la investigación y la extensión se ha mostrado baja solamente entre un

porcentaje mínimo de estudiantes, de 2,3 a 7 %. Lo que sí pudiera llamar a una mayor o más frecuente instrucción acerca de las mismas a los estudian- tes son las respuestas «moderada», que se dieron entre un 9 y un 20,9 % del total.

3.8. Práctica profesional

Como se aprecia en la figura 11, son nueve las di- mensiones, con cinco valores de respuestas para cada una: muy bueno/a, bueno/a, regular, malo/a y muy malo/a.

En este apartado, como en ningún otro, en todos los ítems se dio un número más o menos elevado de personas que no respondieron, lo que podría explicarse por el hecho de que es del primer año la mitad de la población encuestada de la carrera de Ciencias de la Educación, y por lo tanto aún no vivenciaron la práctica profesional o todavía no recibieron información suficiente sobre ella (las prácticas inician en el semestre n.° 3). Lo expresado puede reforzarse también al revisar los resultados del ítem 3 «importancia de la práctica profesional para la formación», uno más de opinión que de co- nocimiento sobre el hecho; en este caso las cifras difieren notoriamente con las demás, por alcanzar solo un 18,6 % de «sin respuesta», mientras en todos los demás ítems oscilan entre 32,5 y 41,8 %. Es más, las respuestas positivas del mismo ítem 3 son de 81,4 %.

En el resto de los ítems las respuestas son similares, salvo para la primera aseveración, pues opinan que la «coherencia con el perfil de egreso, de la práctica profesional, es» muy buena un 41,9 % y buena un 20,9 %. Vale también señalar que las respuestas positivas son mayores al 50 % solo con respecto

Figura 10. Extensión e investigación

a «acompañamiento del docente de prácticas a los estudiantes» y «carga horaria de la práctica profesional», es decir, hubo bastante satisfacción con estos aspectos, mientras que con los demás todavía puede mejorar, en especial en cuanto a la «pertinencia de los documentos entregados por la Unidad de Práctica Profesional (UPE)» que no al- canzó 40 % de positivos y suma además 11,6 % de respuestas regulares y 9,3 % de negativas.

Por último, se señala que hay satisfacción buena con la «orientación recibida por los estudiantes pa- santes en las instituciones de práctica», pero que pocos dieron la respuesta de muy buena, mientras un 32,5 % dijeron buena y 13,9 % regular. Esto significa que se podrían buscar estrategias para contar con más colaboración por parte de las ins- tituciones de práctica (las cuales son externas al INAES) o para suplir la insuficiente o nula informa- ción que proveen a los estudiantes.

4.Discusión final (recomendaciones y reflexión)

El estudio permitió recoger una amplia e importante información proveniente de las opiniones en ocho de los temas referidos al bienestar estudiantil en la licenciatura de Ciencias de la Educación del INAES y de la comunidad educativa en general, siempre atendiendo las percepciones y valoraciones de los estudiantes. En algunos casos, las respuestas no fueron las esperadas o superaron las expectativas positivas y en otros, su diversidad llamó la atención.

Se ha podido constatar que los estudiantes de- muestran mucho interés en participar en la evaluación de su institución y de la educación im- partida en la misma, a través de la expresión de sus

opiniones, propuestas e intereses sobre diversos aspectos institucionales. La cantidad y variedad de información lograda permite postular que la consulta es un útil mecanismo de participación es- tudiantil; y, aunque existen otros mecanismos de participación, el emprendido ayudó a hacer escu- char las voces de los estudiantes, principalmente a través de la expresión de sus preocupaciones, sus necesidades y sus propuestas. Es destacable también que, siendo parte activa de este trabajo, han contribuido significativamente en la evaluación de nuestra institución.

Se encuentra una apreciación entre muy buena y buena en los temas de infraestructura, desarrollo de la enseñanza y el aprendizaje, biblioteca, ex- tensión, investigación, plan curricular de la carrera de Ciencias de la Educación y gestiones (direc- tivas, administrativas y de carrera). No obstante, algunos puntos demostraron desempeños más bajos de lo que se desearía, hasta niveles que pre- cisarán de acciones para apuntar a correcciones o mejoras inmediatas.

Ciertas áreas, servicios y realidades requerirían atención especial, como las que exponemos a con- tinuación, en un orden de prioridad:

Componentes fundamentales (áreas transversales):

1.El desempeño en este tema curricular muy im- portante ha sido más bajo de lo esperado, pues de los siete componentes evaluados solo dos arroja- ron resultados en los que los positivos son mayoría: educación inclusiva, y desarrollo del pensamiento crítico y productivo. Todos los demás tendieron a los negativos, resaltando Educación para la seguridad

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Figura 11. Práctica profesional

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vial, la cual por ley de la nación está presente en todos los niveles educativos desde el preescolar (Ley N.° 5044), y que además es una materia que pueden impartir en la secundaria los egresados de la carrera, por lo que de alguna manera debe intro- ducirse con más énfasis en el proyecto curricular, necesario esto no solo por mandato legal, sino para una vida mejor y más segura, para proteger el medioambiente y para relacionarnos mejor con los demás (Oviedo, 2019, cap. 1). El segundo desem- peño bajo lo tuvo el eje de Educación ambiental y para el desarrollo sostenible, extrañamente en esta época de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las NN. UU. (ODS) y de la lucha contra el cambio climático; por lo tanto, rápidamente se deben tomar medidas correctivas. Además, otros tres: educa- ción familiar, para la paz y democrática, necesitan mayor atención en la carrera, incorporarlos real- mente de manera transversal (para esto es preciso capacitar y actualizar a los mismos docentes del INAES), y como asignaturas o como contenidos de otras diversas cátedras.

Docencia

2.Sobre los profesores, la percepción se muestra mayoritariamente positiva, pero en casi todos los puntos consultados se precisarán algunas mejo- ras (al menos por parte de algunos profesores), en especial en cuanto a: «fomento de la extensión uni- versitaria» (para esto, reglamentar la participación y obligaciones de los docentes, es el primer paso), el “uso de metodologías variadas e innovadoras” (objetivo que puede alcanzarse a través de la forma- ción de los formadores), la «realización de cambios oportunos según las evaluaciones» (este tema ya implica compromiso de los profesores, y, sobre todo, actitud autocrítica y apertura a la opinión de los demás). Además, en las preguntas abiertas los estudiantes pidieron: “clases más participativas y democráticas” (incluyendo más apertura al diálogo, ser escuchados, y más decisiones consensuadas), así como “que mejoren las adecuaciones curricu- lares”. En sus sugerencias a docentes, entre otras cosas, también señalaron que quieren menos «con- ductismo», “más innovación”, “más fomento de las extensiones y de las actividades extracurriculares”, y “acelerar las devoluciones de evaluaciones”.

Infraestructura:

3.Acceso al wifi en el bloque de la carrera: ha sido otro de los temas con mayor número de

respuestas negativas. El llamado es a mejorar aún más el servicio, mediante acuerdos interinstitucio- nales o nuevos contratos.

4.Al respecto de la accesibilidad a la sala de UTE (TIC), puesto que la misma está en la segunda planta del bloque 1, con ingreso únicamente por escaleras, pareciera que una mayoría de estudian- tes no tuvo en claro lo que significaba la palabra accesibilidad, y quizás confundieron el término con acceso a Internet o acceso a los servicios dentro de la sala. Los resultados de las preguntas cerradas, que no precisamente fueron negativos, también podrían interpretarse como poca empatía hacia personas con movilidad reducida; sin embargo, en los espacios para que dejen comentarios o su- gerencias, varios estudiantes han pedido que UTE sea más accesible físicamente, señalando incluso la falta de rampa.

Servicios

5.Sobre los servicios de salud, la encuesta indicó que el “horario de atención de la enfermería” es un punto a mejorar, de hecho, el focus group arrojó cuestionamientos acerca de que al igual que la bi- blioteca ya no está disponible desde antes de que las clases culminen a la noche. Como es un ser- vicio muy importante y casi vital, se podría contar con más personal para atender. Otra consideración es que la cantidad de ítems con cierto número de ausencias de respuestas (figura n.° 4) es elevado en comparación al resto de los subtemas de la encuesta, hasta un 28 % con relación a la aten- ción médica, y entre 12 y 16 % sobre enfermería y odontología; estos resultados estarían señalando fallas de comunicación.

6.Comunicación: podría mejorar en algunos as- pectos, principalmente porque algunos medios antes no considerados importantes o inexistentes, hoy son muy valoradas por los estudiantes, por la comunidad y por el mundo exterior; nos referimos a las redes sociales, el correo electrónico y a otros servicios digitales, en los cuales el INAES ya lleva tiempo incursionando.

Entre los ítems evaluados, luego de analizar la figura n.° 5, se ha notado que requieren más atención la “actualización de la web del INAES”, así como su “facilidad de uso” (pudimos constatar, además, que al acceder a la misma desde teléfonos celu- lares no se despliegan las ventanas internas de acceso, por ejemplo), y la “gestión de las redes

sociales” de la institución. Por último, los alumnos expresaron desear recibir más información sobre el funcionamiento y los procesos administrativos y académicos de la institución, incluso algunos su- girieron mayor y más rápido acceso a datos sobre matrículas, exámenes, horarios, etc.

De hecho, en la figura n° 5, ya se pudo apreciar que el ítem 7 “Se comunican oportuna y adecua- damente las actividades vinculadas a la carrera” es uno de los de mayor número de respuestas nunca y raras veces (sumando juntas un 23,2 %). Por lo tanto, los estudiantes precisan vías más rápidas o más directas de comunicación insti- tucional, quizás dotando de más personal a los departamentos correspondientes.

Gestión

7.Sobre las diferentes gestiones del INAES, al fi- jarnos en la sumatoria de las respuestas nunca y raras veces (figura n.° 5), la cifra mayor es la del ítem 8 “los horarios de atención a los estudiantes de la carrera de las diferentes dependencias del ISE”, con 32,5 %; esto significa que existe cierta discon- formidad, misma que puede atenderse a través de la modificación de los horarios, por ejemplo, me- diante el establecimiento de turnos diferenciados o rotativos para el personal. Todo lo demás que fue medido sobre las gestiones directivas, de carrera y administrativas mostró alta conformidad de los estudiantes, aunque aún pueda mejorar.

Otras cuestiones

8.Se sugiere también la adecuación de los hora- rios de las dependencias administrativas al horario de clases del turno noche, pues algunas se hallan solo parcialmente disponibles. Otra cuestión podría ser acelerar los tiempos de gestión en UARA (Unidad de Admisión y Registros Académicos), y los procesos de la misma, tal vez mediante nuevos procedimientos o formatos.

9.Con respecto a las prácticas profesionales, se ha visualizado la posibilidad de brindar más informa- ción, de mejorar las orientaciones, y de una mayor pertinencia-adecuación de los documentos para la realización de las mismas (o sea, más acordes a lo que se realiza realmente). Algunas sugerencias más aparecieron en los comentarios finales sobre las prácticas, entre ellas: “los documentos para la práctica IV no eran pertinentes”, “mayor comuni- cación entre docentes relacionados con la práctica

profesional; unificación de respuestas”, “hubo muchas dificultades con los documentos asigna- dos”, “la práctica profesional debe ser un lugar de apoyo al estudiante”, y “más acompañamiento”.

10.Un pedido que también más de una vez se reiteró fue el de realizar más actividades académi- cas e institucionales en el turno noche, esto quizás debido a que la mayoría de las mismas suelen tener lugar a la mañana o la tarde.

Las mejores calificaciones

En cuanto a lo evaluado con mejores calificacio- nes, resaltamos que los estudiantes han percibido de muy buena manera a la biblioteca (salvo en lo que respecta a la imposibilidad de buscar y revisar físicamente los textos; un pedido reiterado, en el focus group y en el piloto en otra carrera), y las gestiones directivas, administrativas y de la carrera.

Además, dos direcciones del INAES, de Extensión y de Investigación, pueden orientar sus actividades considerando las buenas oportunidades existen- tes para aprovechar el elevado interés que están suscitando en los estudiantes. Pareciera que, al contrario de la vox populi, realmente los alumnos saben que la educación superior no se reduce a las aulas o a la mera formación profesional y nada más. Estas noticias son muy positivas y deben mover a la acción, sobre todo para buscar un mayor res- paldo por parte de los profesores de la carrera a fin de que los estudiantes investiguen más y par- ticipen más en distintas actividades de extensión (esto se puede lograr mejorando la comunica- ción, reglamentando el apoyo docente en estas áreas, estableciendo proyectos interestamentales, creando la figura del docente extensionista, fomen- tando las investigaciones conjuntas entre docentes y estudiantes, etc.).

Reflexiones finales

En general, esta investigación permite concluir que los estudiantes poseen una alta valoración de su carrera y del INAES, reflejada en la bien ponderada satisfacción con las condiciones institucionales, la gestión y la formación impartida; y en el elevado in- terés en participar en actividades y trabajos propios de la educación superior ofrecidos por el instituto. Así mismo, han puesto de manifiesto la existen- cia de áreas, servicios y aspectos específicos que precisan de la atención o intervención de las autori- dades, a fin de realizar transformaciones y mejoras

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que propicien el cumplimiento de los fines institu- cionales. Por último, los estudiantes han mostrado que poseen un elevado interés en colaborar y en evaluar, participando y expresando sus opiniones y valoraciones, sea a través de este tipo de estudios o de otros mecanismos.

Por otra parte, se puede afirmar que, como en toda institución educativa, en el INAES existen conflictos tanto latentes como manifiestos; sin embargo, a juzgar por los resultados del trabajo, las condiciones institucionales permiten numerosas oportunidades para orientarlos o gestionarlos positivamente; mas, para lograr esto es importante oír a la comunidad educativa, propiciando su participación.

Estudios como este dan o amplían las voces estu- diantiles, por lo que es de esperarse que el mismo propicie o inspire la realización de otros similares; y, también (sobre todo) que los responsables ins- titucionales presten atención al mayor número posible de sugerencias, opiniones y recomenda- ciones descubiertas o expresadas por los propios estudiantes. Teniendo en cuenta las voces de los estudiantes antes de actuar o de decidir, se gene- ran ambientes cada vez más democráticos y más pacíficos (menos «conflictivos»). El compromiso de funcionarios, docentes y directivos consiste pues en escuchar, fomentar la participación y construir la educación comunitariamente, en aras a la transfor- mación educativa y social.

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