CUADERNO DE PEDAGOGÍA UNIVERSITARIA | VOL. 21 NÚMERO 40 | PP 71 - 86
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realizó, conrmaron, realizó, presenta, determinó,
concluye, encuentra, considera, estudia, observó,
se propuso, hace referencia, concluyó, propone,
observa, se planteó, se basó, señala, aplicó,
recogió, elaboró, evidenció, entre otros. Con el
objeto de diferenciar la voz propia de la constelación
de voces referidas, se indica “la autora”, “el autor”,
“los autores”. Asimismo, puede recurrirse a formas
personales (hizo, concluyó, elaboró) o impersonales
(se hizo, se concluyó, se elaboró), sea en presente
o en pretérito.
4.2. ¿Cómo establecer el nicho de investi-
gación?
Este movimiento retórico, que se gura como una
“bisagra” (Shehzad, 2008) entre el establecimiento
del territorio y la ocupación del nicho, es de naturaleza
argumentativa, puesto que el escritor asume una
visión crítica y distingue otro espacio susceptible de
ser explorado, corrobora y justica la importancia
de su investigación con las lagunas que deben ser
llenadas, y busca que su contribución sea aceptada
por los pares académicos que están evaluando la
tesis. Dicho de otro modo, debe posicionarse en
el estado del arte respecto de un tema concreto
(Adika, 2014; Bunton, 2002; Swales, 1990; 2004).
Para alcanzar este propósito, se incorporan citas
que coneren rigurosidad a los argumentos, apoyan
decisiones teórico-metodológicas y establecen el
diálogo intertextual a n de negociar el conocimiento
con la comunidad discursiva. En el caso de las
tesis, constituyen “la garantía de que el tesista-
investigador no solo realizó una revisión teórica
profunda sobre el tema; sino que, además, logró
instaurar una interacción con las ideas y propuestas
ya existentes en la comunidad disciplinar sobre el
tema que desarrolla” (Bolívar, 2019).
Es recomendable que se conozcan y apliquen los
distintos pasos retóricos a través de los cuales
se construye el nicho de investigación. Una de
las estrategias esenciales es identicar los vacíos
(gaps) existentes en los antecedentes, por cuanto
así se comprueba que el objeto de estudio aún
no se conoce en su totalidad. Se puede aludir,
igualmente, mediante una necesidad o problema
reportado por otros investigadores, por el propio
autor o bien, ya declarado en la literatura revisada
y refrendado por el autor. Otra manera de construir
el nicho de investigación es apelar a la formulación
de preguntas de investigación, que concretan la
indagación y se relacionan con los objetivos. Estas
preguntas deben ser el resultado de una revisión,
contextualización y argumentación precedente.
De igual forma, se constituye el nicho con el
seguimiento de una tradición (Díaz, 2022; Jara,
2013; Montemayor, 2012; Shehzad, 2008). Este
paso permite aportar información a lo ya conocido
para incrementar el conocimiento sobre el tema en
el campo disciplinar.
A continuación, en la Tabla 5, se indican algunas
pistas léxico-gramaticales de los pasos para el
establecimiento del nicho de investigación.
Tabla 5. Pistas léxico-gramaticales del estable-
cimiento del nicho de investigación
P7 Presenta
contraargumentos a
estudios previos
Particularmente en los trabajos
revisados, referentes al área de
Lengua y Literatura en los libros
de texto, se observa el estudio de
temas, contenidos o competencias
generales, con lo cual no se
indaga, ni se profundiza, ni se
concluye en un punto especíco
(TG5).
P8 Indica una
brecha o vacío en el
conocimiento
Toda la revisión realizada deja ver
que, si bien se reere la frecuencia
de las perífrasis de innitivo, no en
todos los trabajos reseñados los
datos se cotejan con las perífrasis
de gerundio o participio, con lo
cual no se ofrecen elementos
para el contaste (…) Asimismo,
no en todos los trabajos, salvo los
de Troya (1999) y Sedano (2006),
destacan variables lingüísticas
asociadas con el uso de las
perífrasis de innitivo. Es común
que en los trabajos reseñados
se parta del valor temporal
futuro de estas construcciones,
pero no siempre se señalan las
condiciones lingüísticas en que
estas se presentan (TG1).
P9 Presenta un
problema declarado
por otros o por el
propio autor
Dentro de los errores
morfosintácticos más comunes…
destacan la utilización inadecuada
de los sintagmas en las oraciones,
la concordancia gramatical entre
diferentes estructuras oracionales,
imprecisión sintáctica de
concordancia en cuanto a número-
género y entre sujeto-predicado,
omisión de preposiciones o
conjunciones y el uso innecesario
de las mismas, problemas de
coherencia, incongruencias
en las ideas expuestas y poca
claridad entre las ideas principales-
secundarias (Bustamante-
Rodríguez et al., 2018).